En una reciente entrevista en *Mundo Empresa*, Edwin Harvey, el emprendedor correntino detrás de Maie Alfajores, relató cómo su pasión por la repostería se transformó en un exitoso negocio que ahora llega a mercados internacionales. "Nace en pandemia, por invención de mi hermana", explicó Edwin. "Ella es la que está detrás de todo, es la genia", destacando la inspiración que surgió en momentos difíciles.
La elección del nombre del emprendimiento tiene un significado especial: "Maye, mi mamá es maestra jardinera, y el apodo de mi hermana era Maye", comentó. Este toque personal y familiar se traduce en un producto que busca preservar la esencia artesanal: "Lo principal, aparte de lo artesanal, es mantener ese factor casero", enfatizó Edwin sobre la calidad de sus alfajores.
Respecto a la aceptación del producto, Edwin se mostró sorprendido por la demanda: "Hoy la verdad que crecemos constantemente... me sorprende siempre la aceptación que tiene". El éxito en ventas se debe, en parte, a la importancia de las redes sociales en su estrategia de marketing: "Es la nueva vidriera, donde tenés que estar... es vital hoy en día".
El proceso de expansión al mercado estadounidense fue impulsado por su hermana, quien se trasladó a ese país para iniciar la venta de alfajores. "Ella se encarga de todo lo que hay allá, una cuestión de logística", explicó Edwin, quien permanece en Corrientes gestionando la producción. La familia se esfuerza por mantener la calidad del producto: "La masa del alfajor es totalmente casera, una receta súper secreta", aseguró.
Finalmente, Harvey compartió las dificultades de mantener la producción artesanal sin conservantes. "Siempre trabajamos e innovamos, apuntamos a ofrecer el producto con las mayores garantías posibles", comentó, subrayando el compromiso con la calidad y el sabor casero.
Para quienes deseen disfrutar de estos alfajores, Edwin invitó a seguirlos en Instagram y contactarlos para pedidos,
La elección del nombre del emprendimiento tiene un significado especial: "Maye, mi mamá es maestra jardinera, y el apodo de mi hermana era Maye", comentó. Este toque personal y familiar se traduce en un producto que busca preservar la esencia artesanal: "Lo principal, aparte de lo artesanal, es mantener ese factor casero", enfatizó Edwin sobre la calidad de sus alfajores.
Respecto a la aceptación del producto, Edwin se mostró sorprendido por la demanda: "Hoy la verdad que crecemos constantemente... me sorprende siempre la aceptación que tiene". El éxito en ventas se debe, en parte, a la importancia de las redes sociales en su estrategia de marketing: "Es la nueva vidriera, donde tenés que estar... es vital hoy en día".
El proceso de expansión al mercado estadounidense fue impulsado por su hermana, quien se trasladó a ese país para iniciar la venta de alfajores. "Ella se encarga de todo lo que hay allá, una cuestión de logística", explicó Edwin, quien permanece en Corrientes gestionando la producción. La familia se esfuerza por mantener la calidad del producto: "La masa del alfajor es totalmente casera, una receta súper secreta", aseguró.
Finalmente, Harvey compartió las dificultades de mantener la producción artesanal sin conservantes. "Siempre trabajamos e innovamos, apuntamos a ofrecer el producto con las mayores garantías posibles", comentó, subrayando el compromiso con la calidad y el sabor casero.
Para quienes deseen disfrutar de estos alfajores, Edwin invitó a seguirlos en Instagram y contactarlos para pedidos,
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